El día de hoy damos por finalizada esta observación de la ciudad de Bogotá que iniciamos meses atrás. Durante todo este proceso académico y de investigación los integrantes del grupo conformados por estudiantes de diferentes disciplinas nos hemos dado cuenta de nuestro crecimiento como investigadores y la capacidad para trabajar en grupos formados ya sean de disciplinares o interdisciplinares.
En este proceso interdisciplinar hemos sido consientes de todas las variantes de estudio que plantean las ciencias humanas sobre la ciudad de Bogotá. Dado que nuestra ciudad presenta todo tipo de expresiones culturales, las miradas que se le puedan a estas perspectivas desde cada disciplina de los integrantes del grupo nos permiten estudiar los acontecimientos citadinos desde varios visiones y no quedarnos con un solo camino.
Este semestre pudimos ser testigos de varios acontecimientos que fueron importantes para nuestras observaciones e investigaciones. Las elecciones presidenciales marcaron a una ciudad que se debate a favor o en contra del proceso de paz que se está llevando con las FARC en la Habana. Solo con este acontecimiento puntual nos dio muestra de lo dividida que esta la ciudadanía respecto al proceso de paz y la aceptación de que los Colombianos debemos propiciar un cambio al interior de nuestro actuar y memoria nacional.
Estos meses de investigación no solo dejaron en evidencia estos aspectos. Bogotá sigue brillando como baluarte cultural de Colombia, de a poco expresiones artísticas como los graffitis van siendo aceptadas por los ciudadanos y las organizaciones estatales dan en evidencia del lento avance que va teniendo la tolerancia en la ciudad. Pero no solo es en los campos de la expresión cultural donde hemos notado los progresos: Festivales de cine, tertulias, conversatorios etc.
Estos eventos han estado educando a las personas para enfrentarse a lo que sería un post-conflicto en caso de que los diálogos de paz obtengan el resultado esperado. La educación que se ha estado impartiendo a los ciudadanos para que dejen los odios y perjuicios a un lado, pensamientos y sentimientos que como nos hemos dado cuenta con estos meses de observación están muy asimilados por los bogotanos, y obtén por el perdón y la reconciliación son de gran ayuda para que desde el interior de nuestra sociedad se den los primeros pasos para un mejor futuro.
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