Tomado de: https://twitter.com/serpilo_paga |
Durante mucho tiempo algunas universidades de Bogotá se pensaban solo
para la élite, hoy gracias a programas como “Ser Pilo Paga” los estudiantes
pueden forjar un futuro muy esperanzador donde nunca lo habrían imaginado. Sin
embargo, hace un tiempo atrás era difícil que los estudiantes que siempre han
contado con la posibilidad de estudiar en las prestigiosas universidades aceptaran
ese cambio dentro de las instituciones y empezaran a convivir con nuevos
compañeros, en este caso, beneficiarios del programa “Ser Pilo Paga”.
A raíz de esto, podemos darnos una idea acerca de la problemática tan
común como lo es la desigualdad de clases. El estudio que realizó la Socióloga
María José Álvarez nos hace pensar y replantearnos la situación por la que
pasan los jóvenes becados en las universidades de élite. Los resultados del
estudio nos permiten detallar un panorama completamente distinto al habitual,
mostrándonos cómo los estudiantes que aplicaron al programa “Ser Pilo Paga”, se
relacionan en perfecta sincronía con los estudiantes de estratos más
privilegiados.
Se entiende que no en todos los casos estas amistades pueden llegar a
sustentarse, pero lo que justamente permite este tipo de programas y
privilegios es acercar y romper barreras entre la diferencia de clases. Uno de
los principales aportes del proyecto es crear un espacio en donde las personas
de estas universidades puedan dar a conocer sus opiniones e ideas acerca de las
otras personas respecto a lo que se vive desde la "desigualdad", un
80% de los estudiantes piensan que no hay razón para no relacionarse con estudiantes
de baja economía, pero la pregunta que realiza el estudio es ¿Y si ustedes
fueran uno de esos estudiantes? El estudio está basado en un muy buen campo, en
aprender cómo sería el nuevo desarrollo de relaciones entre sí.
Se podría decir
que la desigualdad es un tema que, desde varios años, a caracterizado diversas
investigaciones sociales. Lo interesante del estudió realizado por María José
Álvarez es cómo logra extrapolar ese concepto de “desigualdad” y desde allí
poder entender los cambios en las dinámicas sociales en las vidas de los estudiantes
becados. La investigación de Álvarez, busca comprender la forma en la que las
personas conviven y experimentan la desigualdad, lo llamativo que se puede
evidenciar en este tipo de proyectos es cómo por la cercanía de los estudiantes
se observa que hay un quiebre en esos “prejuicios”, la percepción de alteridad
ya no está en juego y se empieza a gestar un entretejido social con un enfoque
más humano, consiste entonces en ver al otro como un igual, se deja de señalar
al “pobre”, “al clase baja”, al “ñero” entre otros términos que si hacemos un
pequeño viaje al pasado, seguramente sí hubiesen tenido lugar en las sociedades
ates del “Ser Pilo”.
Tomado de: noticias.universia.pr |
Por otro lado, cabe resaltar algo aquí
y es ¿Qué pasa con los no “Pilos”? si pensamos un poco en esta otra cara de la
moneda, podríamos arriesgarnos a imaginar que ellos sí deben enfrentar la
desigualdad o la conformidad con determinada carrera o institución a la cual se
vieron obligados a asistir ¿Qué mejoras se lograrían establecer desde la
educación para seguir haciéndole frente a ese tipo de brecha social?
FUENTE:
Correa, P. (febrero 26, 2018). “Ser Pilo
Paga está rompiendo prejuicios”: María José Álvarez Rivadulla. 01 de marzo de
2018, de El Espectador Sitio web: https://www.elespectador.com/node/741317
Comentarios